Castillos hinchables, ciudades de pecado, el primer beso a la mujer con la que crees que compartirás el resto de tu vida y el Mclaren Honda de Alonso out en el Pit line.
McDougall es posible que tuviera razón cuando dice que correr reúne dos de nuestros impulsos más primarios: El miedo y el placer. Corremos cuando estamos asustados, corremos cuando estamos extasiados, corremos cuando huimos de nuestros problemas y correteamos en busca de diversión.
David Jiménez sigue su regularidad en Montaña desde que empezó la temporada y Cenes no sería menos. Allí también colocó su Castillo hinchable. Y es que para "el Gato" un Trail es como subirse en una de estas atracciones para niños.
Hay castillos hinchables de todos los tipos, formas, tamaños y colores y siempre están repletos de niños y niñas que ilusionados, saltan, corren y se lanzan por lo toboganes como si no hubiera un mañana. Exactamente igual que un Trail, pero en vez de con niños, con niños grandes.
El éxito del Trail Sexitano es ver la montaña en apariencia como estos castillos, ya sabéis, acolchada y segura. Pero más allá de la diversión, los castillos hinchables pueden ser también peligrosos. Sin ir más lejos, hace poco uno salió volando y dejó a dos niños en la azotea de un centro comercial. La montaña también lo es y te puede poner en tu sitio a las primeras de cambio, y estos corredores (Pino, Cris, Fran, Iván, Alfredo, David, Robertillo, Keni, Toni...) lo saben.
Más allá del éxito "Deivi Cat" estaba la visión de Robertillo de la Montaña, que muy a mi pesar no es como ese instante justo antes de dar el primer beso a esa chica con la que crees que compartirás el resto de tu vida. No. No van los tiros por ahí, ni siquiera cuando ese amor que crees que será para siempre te deja y vas al Mercadona, compras veinte latas de cervezas y cuando te pregunta la cajera: ¿Son todas iguales? Respondes que crees que si. Creo que entre medio de las dos cosas y la ilusión del niño saltando en el castillo hinchable está la visión "montañera" del Chatillo...
Gugu es Batman. Llegó a Cenes como el rocío en abril, la caída de los peciolos en otoño o el calor en verano. Conquistador llegando al Robinson, Almuñécar y Cenes de la Sin City casi con el tiempo cumplido pero con la mejor etiqueta aunque no fuese la de un traje a medida de Armani. Al acercarse a meta volvió a oler fuerte, a recorrer esos metros donde te invade la gente a voces buscando sacar la foto en meta. "Lavezzi" gozaría siendo el sustituto de Christian Bale. Más madera que Ben Affleck tiene seguro. Si hay un hombre murciélago en la actualidad cuidando de los suyos, no es otro que Gugu. Vigila con destreza y para a los malvados. Batman está en el Sexitano.
Y así acabó este Trail, con dos podios, (David y Cris) un montón de buenas actuaciones, definiciones un tanto filosóficas de la montaña, otro 1 hora 12 minutos en Córdoba y un Mclaren Honda con neumáticos blandos en el semáforo de Ecoprinter que aún no se sabe si se quedó clavado en el Pit Line o en el Pit Babe...
Viva el auténtico.
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