Esta son la caras...
Las caras de Rodo, Jacinto, Pino, David y muchos más. Las caras que se te quedan justo después. Las caras que se te quedan al llegar. Las caras del "ya sabíamos que lo conseguiríamos". Las caras de los calambres, de kilómetros y kilómetros, de apretar los dientes. Las caras del "tropecientos maratones" de los 101, y de miles de medias. De imaginar esas caras que dijeron una y otra vez que no lo lograríamos, que no podríamos.
Las caras de los nervios previos a la celebración de las carreras que organizamos. Pero también las caras de la satisfacción de divertirse con un deporte que es nuestra pasión y por supuesto las caras de tristeza por no conseguir el objetivo por el que lo has dado todo.
Las caras cuando llega ese momento en el que lo ves todo negro y te preguntas: " De verdad vamos a renunciar a esto?. ¿ Se puede pedir algo mejor...? y te dices: "ostia, pues no. En el trabajo no se siente lo mismo....
Felicidad. Que bonito nombre tienes.
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